¿CUÁL ES LA COMPOSICIÓN DE UNA CERA DE BAJA FUSIÓN?

En los protocolos Starpil siempre recomendamos la combinación de ceras de baja fusión con sistema roll-on o lata. Las zonas más sensibles, como ingles, axilas y facial con cera de baja fusión y zonas más amplias, como piernas, espalda, etc, cera en rol-on o lata.

La cera de baja fusión también es conocida como cera caliente.

Una de las principales materias primas que cumple con la importante función de darle adherencia a la cera es la colofonia, una resina de origen natural. Esta resina se extrae de un pino especial, que se cultiva de manera sostenible y controlada para realizar una cuidadosa extracción de la resina.

Hay varias calidades de colofonias que se clasifican en 6 (de la A a la F). Las de mala calidad se cristalizan formando ácido abiético en solamente 15 minutos y las de alta calidad forman estas micropartículas en 4 horas. Estas micropartículas hacen que la cera se vea de muy mala calidad, rompiéndose en su extracción. En Starpil utilizamos para todas nuestras ceras de baja fusión las calidades A y B. Las dos mejores calidades que nos garantizan que no cristalizará hasta después de 4 horas. Nuestras ceras de baja fusión, con una buena técnica de aplicación, no se rompen y permiten trabajar cómodamente a la profesional.

Otro componente muy importante en la composición química de nuestras ceras es la cera de abejas (cera alba). Este componente cumple un rol muy importante dentro de la formulación de la cera. Es muy común encontrarla en diferentes fórmulas de cosmética hidratante, emoliente, cicatrizante, etc. En una cera, sobre todo, cumple su propiedad más destacable es que baja el punto de fusión que le da maleabilidad y plasticidad, estas dos características impiden que la cera se rompa, punto muy importante en el momento de trabajar para la profesional. Nuestras ceras se logran retirar de la piel en una sola placa, no se rompen. Con una buena técnica de aplicación tampoco dejamos restos de cera sobre la piel. Es muy importante tenerlo en cuenta, si no dejamos restos de cera sobre la piel de nuestro cliente, minimizamos muchísimo la irritación cutánea que puede producir el querer retirar restos de producto pegado.

También utilizamos en nuestras fórmulas diferentes tipos de parafinas. Esta materia prima cumple con la función de modificar el punto de fusión y también le otorga plasticidad al producto.

Otro componente que lo podemos encontrar en nuestras ceras es el dióxido de titanio. Este es un polvo de origen mineral y lo que hace es que la cera sea más cremosa haciéndola más selectiva, esto significa que las ceras cremosas, con dióxido de titanio no tienen tanta afinidad por la estructura cutánea y si por el pelo. De esta manera al no adherirse tanto a la piel es mucho más cuidadosa y amable con ella. Te recomendamos aplicar este tipo de cera en pieles más reactivas, sensibles, pieles que se han expuesto al sol y están morenas y pieles que presentan una leve descamación debido a deshidratación cosmética.

Algo también que tenemos mucho en cuenta es el color y perfume de la cera. A la hora de la práctica es agradable trabajar con productos bonitos para la profesional y para el cliente final.  Podemos jugar con las estaciones del año, usar por ejemplo nuestra cera Chocoterapy en invierno y en verano con la Malva.

Ana Laura Vázquez.

Asesora técnica y formadora de Starpil.